“Mientras dentro
de la misma comunidad GLBTI continúen entre ellos usando app para ligar y tener
sexo casual; mantenga en sus conversaciones términos como la hombrada, la
pasiva, la trava, marica fuerte, etc; y, sus lugares de reunión sean discotecas
donde predominan el alcohol, la droga y prostitución, seguirá siendo parte de
un entorno igual al de la sociedad
heterosexual. No marcará diferencias, ni podrá tener la cara limpia para
reclamar derechos, ni respeto, porque esa misma comunidad no se respeta”.
Hace mucho tiempo
que la mejor arma de defensa dejó de ser el ataque. Seguimos atacando lo
desconocido solo por figurar, ganar popularidad, pero sin propuestas
contundentes que nos lleven a mejorar lo que creemos nos desfavorece. Todo esto
para después terminar entregando una placa, otro figueretismo a los actores que
tanto atacaron y quisieron enfrentar por una obra de teatro cuyo contenido aún
no había sido expuesto.
Con esto me refiero
a la “Michi y Melo 2” una puesta en escena que antes de su estreno ya había
enervado a los autodenominados líderes y representantes de la comunidad GLBTI,
mismo líderes que después replantearon, aplaudieron, gozaron y hasta se rieron
con el contenido de esta obra que ha sido un éxito en cartelera tanto así que
se abrieron fechas dos fines de semanas más de lo que se tenía previsto estar
en escena.
La ganancia: dos
días de talleres sobre sensibilización, trato y uso de los estereotipos gay.
¿Nada más? Cuando aún hay mucho que hacer y trabajar, talleres de actuación
para que la comunidad sea parte de obras de teatro. Lo malo siempre será más
que lo bueno y en la comunidad GLBTI se visualiza de la siguiente manera:
·
Entrevista a Ketsia Borosky sobre su participación en la
obra “ A 2,50 la cuba libre”, 89 visualizaciones en el canal de Youtube de
Música Talento Ec, uno de los pocos medios online que la entrevistó. ¿Recibió
placa de la comunidad? En una de sus presentaciones a las que acudí a Shapo
donde se presentó no vi a nadie de la comunidad aplaudiéndola.
·
Doménica Menesini lleva ya varias participaciones en Pop
Up (sala de teatro para público heterosexual) siendo parte de obras de micro
teatro. La comunidad que tanto la proclamó reina la ha olvidado y el día que
quedó semifinalista entre otros cantantes para elegir al interprete representante
de Ecuador a un festival internacional, la comunidad no movió ni un dedo, ni
hizo marchas a su favor ni se apostó en las afueras del lugar la noche de la
selección con pancartas, vitores, etc.
Entonces de que
apoyo y lucha por los derechos hablamos si en estos dos casos en dos hechos
totalmente positivos para la comunidad está se ha hecho de la vista gorda y han
pasado desapercibidos.
No señores el apoyo
y las marchas y voces en alza deben ser para lo bueno y lo malo, no solo para
lo malo.
La Michi y La Melo
no son personajes reales, pero son una parodia de los gay en general. Y en el
mundo teatral quienes se informan y desean comentar con bases saben que la
parodia es una imitación burlesca que
caricaturiza a una persona, una obra de arte o una cierta temática. Como
obra satírica, la parodia aparece en diversos géneros artísticos y medios. La
industria cinematográfica, la televisión, la música y
la literatura suelen realizar parodias de hechos políticos o de otras
obras. Por lo general se apela a la ironía y a la exageración para
transmitir un mensaje burlesco y para divertir a los espectadores, lectores u
oyentes.
Partiendo
desde allí se sabe que la parodia tiene un mensaje burlesco, pero mensaje al
fin y el de La Michi y la Melo tiene que ver mucho con la discriminación, el
sentido de que los gay son minimizados y en ciertas formas utilizados como
minoría subyugada para fines de enriquecerse, y sobre todo el valor de la
amistad (que es una lazo común fuerte en la sociedad en general) entre 3 gay
que ven la vida desde diferentes ópticas, pero con un solo fin común ser feliz
sin tener que ser recriminados y sobre todo tener participación activa y real
desde la política para contribuir al desarrollo de la sociedad.
En
la parte actoral mis respetos totales a Víctor Arauz por seguir haciendo de La
Michi un personaje “lindis”, personalmente no concibo a otro actor en el
brillo, plumerío y glamour de este personaje, referente del gay actual, más
sincero, más visualizado, creativo y dispuesto a mostrar su talento en
cualquier área.
David
Reinoso enmarcado en La Melo desde “Vivos” nos acostumbro a los clichés de “ es
solo mi bebé”, “policía” nos acostumbró a un personaje de TV que mutó en su
llegada a las tablas en donde se convierte el otro tipo de gay al más
reservado, al “serio”, que no viste extravagante, como le dijo la Michi en la
obra “se quedó en la época de Pelito Marhaca..”
La
inclusión de un 3 personaje como “La Titi” pone en el tapete otra parte de la
comunidad, que así duela existe, la del interior, la de pueblo, la parte que
vive alejada de la gran ciudad, pero por eso no deja de ser gay con forma de
hablar, modismos, que no son los mismos que los de la Michi, que es de la gran ciudad.
En
fin, lo actoral y la puesta en escena puede ser analizada desde ese punto y
escribir sobre la obra sería lo más normal y narrar su argumento, etc, como
hacen la mayoría de críticos, pero en esta ocasión por su mismo mensaje social
y su connotación mediático espero sirva de ejemplo para no cometer los mismos
errores y satanizar una parte del teatro y la actuación como tal.
Finalmente,
no podemos contabilizar cuantas personas del público que ha llenado la sala de
Fedenador es gay y ve con agrado la obra; pero si podemos decir que si el 100%
ha sido heterosexual la sociedad disfruta de la parodia sea este de gay, de los
mismos hombres, mujeres, blancos, negros, indios, cholos, mestizos, pobres,
ricos, etc. Solo dejará de ensañarse con un sector cuando ese sector de
indicios de que se respeta entre ellos y no solo ven lo malo que se dice o hace
de ellos sino que también aplauden todo lo que la sociedad realice en general
por ellos.
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